Arranca la segunda parte en el 15 de Abril. Es 16 de enero de 2021 y Sarmiento juega la cuarta final en poco tiempo para ascender a la máxima categoría. Enfrente está Estudiantes de Río Cuarto que había comenzado ganando el partido pero Claudio Pombo lo había igualado antes del final de la primera parte. Al costado del campo se prepara para ingresar Yair Arismendi. Toto entra, hace las travesuras que solía hacer cuando jugaba en esa posición más vinculada al ataque que a la defensa y después el resultado por todos conocidos: feliz para el Verde y triste para el futbolista; sin embargo, uno meses más tarde, el premio de jugar en Primera le llega, paradójicamente por el equipo juninense, responsable de haberle quitado ese privilegio.
Arismendi nació en San Nicolás, hizo inferiores y debutó como profesional en Douglas Haig de Pergamino, luego pasó al León riocuartense, en 2020, y a principios de 2021 llegó a Junín de la mano de Mario Sciacqua. Desde ese seis de marzo en el que debutó frente a Talleres, salió al campo 100 veces entre Liga (97) y Copa Argentina (3).
Paradójicamente, lejos de aquel extremo que enfrentó al Verde en la final, el nicoleño se ganó un lugar en el corazón de los hinchas verdolagas a fuerza de rendimientos en el lateral izquierdo, entre tantos puestos en los que jugó desde su llegada. Fue delantero, interior, mediocampista por afuera, lateral izquierdo en una línea de cuatro, lateral/volante en una de cinco y hasta terminó de lateral derecho en un partido.
Más utilitario que nunca, en el presente torneo solo se perdió el duelo ante Independiente Rivadavia y de los otros 16, en 15 fue titular. Así, llegó a los 97 partidos en «Primera A» y es, detrás de Sergio Quiroga, el segundo en esa lista de pocos.
Nota: Federico Galván.
Edición, fotos y video: Mariano Morente.